La Celulosa Bacteriana procedente de la kombucha (un cultivo simbiótico de bacterias y levaduras) es capaz de adquirir múltiples formas, espesores, texturas y colores que varían significativamente en presencia de humedad. Tras la presente investigación se confirman las cualidades estéticas y performativas de este material como vestuario para las artes escénicas, pudiendo representar un concepto usando su forma, textura y color, y ser afectado por el agua, perdiendo su rigidez, relieve y opacidad, ganando flexibilidad y adaptándose al cuerpo como una segunda piel; siendo capaz de mostrar una transformación del personaje en escena en una manifestación artística de carácter experimental.